DIA DE LA BANDERA
Uno de los principios básicos de la política es "dividir para reinar". Y antes que exhibir un programa, creo que eso han hecho tanto la señora Keiko Fujimori como el Sr. Pedro Castillo. Marcar la cancha en dos, no creo que sea bueno para un país que ya presenta varias fracturas sociales. Y gane quien gane el próximo domingo, el país que vamos a recibir de esta elección que va a definirse en la recta final, es un país dividido. Con dos posiciones radicales, autoritarias, llenas de cuestionamientos y poco claras en lo programático.
En un país que siempre busca un salvador, un mesías; el caudillo o el poderoso líder, que todo lo componga -lo que me lleva a pensar que en el fondo San Martín tenía razón en la instauración de una monarquía y que me recuerda al libro "Buscando un Inca" del brillante y prematuramente desaparecido ex alumno de La Salle, Alberto Flores Galindo- porque nuestra idiosincrasia no entiende que la construcción de un país no pasa por un iluminado. Pasa por un concepto de nación, por una cultura ciudadana -por ciudadanos y ciudadanía- por institucionalidad, por valores y principios éticos y morales, por entender el sentido y la importancia de lo colectivo, en una "nación" en la que el peruano está acostumbrado a pensar primero en él, segundo en él y tercero en él.
Y es que queda claro que una de las formas más efectivas de gobernar el Perú históricamente, es a partir de infundir miedo, la noticia falsa, el rumor. Miedo es el que generaban las dictaduras de ataño con presos políticos, desaparecidos o desterrados, Este infundir terror es hoy mas solapado, más democrático, afecta el valor más importante en una sociedad de consumo: el bolsillo. Claro que esa afectación es más para los que más tienen, para los que viven mejor, para los que he leído que estúpidamente creen que la mejor calidad de vida "solo se consigue con el trabajo y el esfuerzo propio" y como viven en su burbuja, no entienden lo que es la igualdad de oportunidades, el acceso a la educación, a la salud, al trabajo, a mejores condiciones de vida en una sociedad desigual, no necesariamente porque la gente sea "floja". Porque un mundo más justo y más igualitario en democracia, debería permitir eso, igualdad de oportunidades para todos. Un sentido eminentemente social que es un concepto diferente al asistencialismo. Al final como conversábamos con mi hermano, tal vez la sociedad norteamericana termine siendo la más socialista de todas porque permite políticas con sentido social, porque da acceso a mejores condiciones de vida.
Ese escenario de gentes insatisfechas, pobres, sin oportunidades, con un estado ausente y sin un gobierno que los represente y los mire de frente; unido a la falta de partidos políticos como interlocutores validos de la sociedad y de políticos respetables -porque lo que tenemos son mayoritariamente y con contadas excepciones oportunistas, demagogos, ignorantones, charlatanes y figurettis metidos a políticos- son los culpables de que gente como Pedro Castillo tenga la posibilidad de ser Presidente de la República. Y es que hay que decirlo, aquí no fallo el modelo, fallo el estado, fallaron los gobiernos, la falta de lideres políticos y de otros inmorales, que han saqueado los dineros públicos.
Falta de institucionalidad, de ideas, de políticos y de políticas, que no han reformado por ejemplo, esa Regionalización que no es otra cosa que crear señores feudales en los gobiernos regionales sin mayor control. Por eso es que el modelo redujo la pobreza, equilibro las arcas fiscales pero no redistribuyo equitativamente las mejoras de la economía.
Yo suelo sonreír cuando escucho o leo que ven al Perú con Castillo, como Venezuela. El "cuco" del Comunismo no es posible con ese maestro rural que apenas puede elaborar un discurso con cierta lógica y coherencia. Para llegar a ser Venezuela, primero Castillo tendría que tener las dotes de Hugo Chávez, un congreso mayoritario, gracias a una alianza con diversos partidos y al respaldo de unas fuerzas armadas que Chávez conocía bien. Pedro Castillo no tiene la elocuencia ni el carisma ni las "dotes histriónicas" ni el manejo o el liderazgo de Hugo Chávez, menos la llegada con las Fuerzas Armadas.
El Congreso de la República va a ser hostil tanto a la Sra. Fujimori como a Castillo, porque lo que más saben nuestros políticos es desestabilizar, complotar, oponerse y hoy la calle ya mostro su fuerza. Y cuando la calle se pronuncie, ellos solo van a seguir la fuerza de los vientos. Cerrón no es Montesinos y si llegara a la Presidencia, Castillo va a terminar rompiendo con Cerrón -cosa que ya se vislumbra- y allí va a comenzar el despelote porque la bancada de Cerrón va a pasar a la oposición y el "sostenimiento de la democracia" por parte del resto de partidos representados en el Congreso y va a ser parecido al que le ofrecieron a PPK, que ya vimos como termino. Si esta campaña algo ha demostrado una vez más, es que las puertas del poder se abren desde adentro....y la Sra. Fujimori bien lo sabe.
Y si con Don Pedro Castillo suelo sonreír, con las promesas de la Sra. Fujimori, suelo mover la cabeza, al ver cuan ingenuos somos los peruanos. Porque es cierto que este país no tiene memoria histórica -y por eso las fuentes del hecho más traumático en estos doscientos años de vida republicana, como es la Guerra con Chile son tan pocas- para que aparezca ahora la Sra. Keiko Fujimori, como abanderada de la democracia, de la libertad, de la economía, de la institucionalidad y de los valores que encarna la democracia. Resulta inaceptable que una sociedad que se precie de ser civilizada se olvide lo que fue el fujimorismo, lo que representaron Fujimori y Montesinos, una herencia que hoy reivindica la señora Keiko. Sobre todo con la acusación que tiene en el Poder Judicial tanto ella como el futuro Primer Consorte de la nación, que de bobo solo tiene la cara.
Alguien por ventura puede creer que con la experiencia que tiene el fujimorismo, no va a buscar controlar el Poder Judicial y el Ministerio Público para limpiar a la Sra. Fujimori y a sus compinches. Alguien cree que no va a buscar controlar el Congreso, con lo disciplinados y "honestos" que son nuestros políticos. Alguien cree que este es el ejercito de Bolognesi y de Grau y no va a ser corrompido hoy como lo fue antes. La pregunta que flota en el ambiente es como puede respetar la democracia alguien que la petardeo sistemáticamente y que de no mediar los vladivideos, hoy seguirían en el poder. No dudo que el "tío Vladi" se termine reconciliando con los Fujimori y asesore desde la base naval, donde nadie sabe como vive, pues la gran cantidad de secretos que asesoro le han permitido una cárcel dorada con la complacencia de toda la clase política.
El amor al Perú y al poder todo lo puede. Y no digo nada de la prensa o mejor dicho, de los empresarios periodísticos, porque el jugársela "por amor al Perú" no es gratis. Como no es gratis ese apoyo de mercantilistas de la política y la educación que salen en cuanto programa pueden para "apoyar la democracia y la libertad" en la que dicen que creen. Tiempos difíciles se nos vienen por angas o por mangas, como ya lo he dicho en este blog. Hay que ir pensando en el 07 de junio. Ese día que es el "Dia de la Bandera", ese día comienza la historia de un nuevo "desgobierno". La blanquiroja va a estar a media asta. Como la vieja bandera sucia y desteñida que flamea a media asta en el viejo partido de Paseo Colón por el que guardo sentimientos encontrados.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario