El ex presidente de la República del Perú, Alan García, nos muestra una vez más la cobardía, la podredumbre, el cinismo y la mediocridad de la clase política que nos gobierna mayoritariamente. Y digo mayoritariamente, porque es indudable que no son todos, pero a diferencia de antaño -en un escenario donde no hay partidos políticos- lo que más abunda hoy en la política peruana, son los doctores con título de Azangaro, los oportunistas, los pendejeretes, los mediocres, los rateros de cuello blanco, floro pulido y cinismo angelical. Porque como dijo Víctor Raul Haya de la Torre en su monumental discurso del año 31 en la Plaza de Acho al llegar del destierro...... "al poder llega cualquiera...." . Una frase que el ex candidato presidencial de ACCIÓN POPULAR, Alfredo Barnechea quiso pasar como suya ante una despistada y poco documentada militancia acciopopulista a la que encandila con frases hayistas de diverso cuño que presenta como propias.
Desde el punto de vista estrictamente jurídico, el asilo solicitado no procede. No procede porque al obeso líder aprista no lo persiguen por sus ideas y menos el Estado o el poder de turno. Frente a indicios razonables de culpabilidad, lo que hay es que el Ministerio Público, ha ampliado la investigación en su contra y el Poder Judicial le ha impedido la salida del país. Una salida del país frente a la que con su histrionico cinismo inicialmente "se allano" . El problema es que a los seres humanos la conciencia nos traiciona, los demonios internos nos desbordan y la vanidad del poder exacerba a políticos que tienen grandes y graves contradicciones, que son psicópatas y que ven el saqueo a las arcas públicas, como algo normal, justificado por su labor "en beneficio de las grandes mayorías nacionales" .
En los últimos años, hemos visto como diversos personajes políticos han amasado grandes fortunas "sirviendo al pueblo" y tratan por ello, de diversas maneras de quedarse en el cargo o mejor dicho, en el poder, haciendo derroche de su riqueza sin rubor, frente a un pueblo ignorante y sin cultura que fue el que los eligió y los reelige. Es la misma falta de vergüenza, de sentido común, de delicadeza y de falta de rubor, con la que vemos como una serie de alcaldes elegidos en los últimos comicios, acostumbrados hasta septiembre a empujarse su menú de "ocho lucas", hoy electos comen en restaurantes "cinco tenedores", cotizan vehículos de lujo y hacen grandes fiestas para dejarse deducir y encandilar por la sensualidad del poder y el halago interesado.
En la dirección anterior, la no reelección de Congresistas que auspicia el Presidente Vizcarra, va a significar que dejemos de lado a lo poco rescatable que hay en la política peruana, por su experiencia y capacidad y que nos llenemos de pura piraña que va a pasar sin pena ni gloria por el Congreso, con significativas ganancias tras culminar su periodo.
En la dirección anterior, la no reelección de Congresistas que auspicia el Presidente Vizcarra, va a significar que dejemos de lado a lo poco rescatable que hay en la política peruana, por su experiencia y capacidad y que nos llenemos de pura piraña que va a pasar sin pena ni gloria por el Congreso, con significativas ganancias tras culminar su periodo.
Yo pienso que García perdió los papeles y se desespero pidiendo asilo en la Embajada de Uruguay, al abrirsele un frente que no consideraba como la declaración de Spinola sobre de donde provenían los CIEN MIL DOLARES (US. 100,000) que se le pago por una conferencia en Brasil y que eran de la Caja 2. Estoy convencido que politico cazurro, como es, García, compro el silencio de Barata, al compartir con él sus ganancias, al "pagarle derecho de vista" por lo que recibió. Que teniendo por costumbre nombrar a los Vice Ministros, neutralizado Cornejo -al no poder decir que le impusieron al Vice Ministro- ante una próxima declaración de Cuba acogiéndose a la confesión sincera, Alan toma las de villa diego y en lugar de agallas muestra las plumas. Las mismas plumas que esparcieron en su momento, Fujimori, Toledo y Humala, tratando de victimizarse y aludiendo a la "persecución política". Es curiosa la coincidencia de que así como Fujimori se equivoco al moverse hacia Chile. García se equivoca al asilarse en la Embajada de Uruguay y termina complicando y acelerando absurdamente su situación.
No creo que un país como Uruguay, con una tradición democrática e institucionalista y que tiene un ex Presidente como Jose Mujica, brinde un asilo que no corresponde ni procede por más que sus aúlicos, incondicionales y esa cúpula que quiso -y no ha logrado- alanizar el APRA- lo defiendan. Si prima la tradición de asilo en la república oriental, habrá que evaluar no entregarle el salvoconducto con las consecuencias que ello implica.
Así como la justicia peruana tiene la oportunidad de juzgar a más actores políticos de este drama de la política peruana; de Presidentes ladrones y políticos cleptocraticos y mediocres; las bases apristas tienen hoy la oportunidad de reivindicar el legado histórico y moral de Haya de la Torre, en un momento de la historia del Perú, donde se confunde política con electoralismo, donde se cree que el quehacer politico se reduce solo a llegar al poder y llenarse los bolsillos de plata mal habida. En una coyuntura donde lo que prima en el quehacer diario de la política criolla, es que los intereses personales o de grupo, primen y se maquillan con los intereses del pueblo. La soberbia de García por negarse a bajar la cabeza, terminan mojándose los pantalones. Tiempo al tiempo.
Así como la justicia peruana tiene la oportunidad de juzgar a más actores políticos de este drama de la política peruana; de Presidentes ladrones y políticos cleptocraticos y mediocres; las bases apristas tienen hoy la oportunidad de reivindicar el legado histórico y moral de Haya de la Torre, en un momento de la historia del Perú, donde se confunde política con electoralismo, donde se cree que el quehacer politico se reduce solo a llegar al poder y llenarse los bolsillos de plata mal habida. En una coyuntura donde lo que prima en el quehacer diario de la política criolla, es que los intereses personales o de grupo, primen y se maquillan con los intereses del pueblo. La soberbia de García por negarse a bajar la cabeza, terminan mojándose los pantalones. Tiempo al tiempo.