O MAS BIEN "COJUDIZACION" DE LA POLITICA:
De un tiempo a esta parte, ante el nivel de lumpenización de la política, ante el carácter delictivo que ha tomado esta actividad, marcada por la mediocridad, por la corrupción, por el beneficio personal, por la falta de principios, por la ausencia de pudor y de vergüenza en el ejercicio del poder. En la "toma de decisiones", de personajes que detentan el poder. Individuos que se dicen "politicos", pero que dejan mucho que desear, no solo en lo que tiene que ver con sus condiciones intelectuales, sino con la ética y la moral que deben tener personajes que son elegidos para representar al pueblo, para trabajar en beneficio de las grandes mayorías nacionales, lo que ha significado, que hoy un significativo numero de procesos judiciales de naturaleza penal, tenga en el banquillo de los acusados a politicastros de diverso pelaje y jerarquía. Desde cardenal a paje, esto es desde Presidentes de la República a Congresistas y funcionarios de Estado por rateros.
La política ha dejado de ser una actividad propia de elites capacitadas, preparadas, idóneas, con experiencia y con condiciones políticas para gobernar el país. La actividad se ha dejado mayoritariamente en manos, de individuos inescrupulosos, ignorantones, demagogos, aventureros ávidos de poder, de dinero y del cuarto de hora de notoriedad, que le puede representar, llegar a ser congresista en un país sin institucionalidad, sin partidos politicos. Y la prueba esta en la recua de impresentables que vemos sentarse en el Congreso de la República en los últimos años, presentando disparatados proyectos de ley, hablando una serie de estupideces con aires de solemnidad y llenándose los bolsillos despues de tomar por asalto el presupuesto publico, metiendo gente por clientelaje o por negocio, gracias a las granjerías del cargo o cobrándoles parte del sueldo a sus empleados.
Nuestra crisis moral permanente, en tiempos en lo que lo que importa es el mercantilismo y no el mercado; el yo y no el nosotros, el bolsillo y no la dignidad o la vergüenza, la impunidad y no la justicia; no nos permite levantarnos y plantar cara frontalmente, contra la clase dirigente más corrupta y mediocre en nuestro doscientos años de historia republicana. No nos permite ver que no tenemos futuro como sociedad, sin un criterio unitario de nación, sin un Estado eficiente que esta lleno de las mismas taras de siempre. Sin una educación de calidad que forje elites que construyan un país; con universidades que son un engaño y un negocio, por estas consideraciones y algunas más es desolador nuestro futuro.
Y en medio de ese caos, la gente se preocupa solo por solucionar sus problemas personales; la sociedad civil y el empresariado tibiamente levantan la voz para curarse en salud y no chocar con el gobierno, del que siempre se puede conseguir algo, porque el poder es tributario. Este es un país que ha perdido la capacidad de indignarse. Y en esa pampa de trivialidades y escándalos que no le mueven un pelo a los que detentan el poder -cuyo norte ya ha sido concertado al 2026, para una nueva "transición democrática"- las infidelidades de Cristhian Domínguez y el regreso de Paolo Guerrero, que parece que ya no viene a jugar por la César vallejo, porque su engreimiento y el endiosamiento por el que un estúpido alcalde hasta le levanto un monumento en San Miguel, hacen hoy que despues de la goleada del UTC a los trujillanos, el equipo de los Acuña, le parezca poca cosa para Guerrero.
Y la situación es tan penosa, que el soldado que denuncio el robo de gasolina en el Cuartel General del Ejercito, declara que primero denuncio el hecho a Inspectoría General de Ejercito y no paso nada. Que en la Fiscalía lo pelotearon, que en la Defensoría del Pueblo lo ignoraron. El mismo drama de mujeres violentadas, de gente a la que le roban, la estafan y la extorsionan, mientras en el Ministerio del Interior, el Ministro es ya un cadaver político al que es muy difícil que Don Nicanor Boluarte Zegarra pueda mantener en el cargo, para salvarse él de la hoguera. Y fue recién cuando este valiente soldado deserta y recurre a la prensa, a una prensa que entiende que su papel es investigar, fiscalizar, ser incomodo al poder, denunciar, que las corruptelas, los escándalos y que las raterías de los politicos son noticia; que el hecho adquiere notoriedad, porque se conoce que los herederos de Bolognesi se siguen robando gasolina, como se roba al traficar armas o se gana en comisiones por compra de armas. Una historia harto conocida.
Y como en el proceso de publicar, de tener el dato o "la pepa" de lo que sucede en una investigación, se filtran actuados reservados de la investigación o de los procesos. Porque estamos en la era de las comunicaciones, de la información, no del conocimiento, porque hoy los jóvenes son más ignorantes que antes, pues nuestra educación es para llorar -y hablo por lo que tengo en casa- pues en mi tiempo estudiábamos anatomía, geografía e historia del Perú y por eso hoy como los jóvenes no conocen nuestra historia, identificarse y amar al Perú, no es Grau o Bolognesi, es la selección o Paolo Guerrero. Patético.
En los tiempos del mediatismo, lo que debería ser reservado, se vuelve publico y ni el Poder Judicial ni el Ministerio Publico, dictan normas o establecen sanciones para evitar la filtración de actuados judiciales. Y ante el escandalo, que desnuda a nuestro políticos, por "choros" o por corruptos; no les queda otra cosa que -como en el caso de la Fiscal Benavides y de las ultimas declaraciones de su ex asesor que han movido el ambiente político- "sacar su propia artillería", la prensa que le es adicta, para rasgarse públicamente las vestiduras, presentar a la Sra. Benavides, como victima de una conspiración y hablar de la "politización de la justicia". Termino que solo se explica porque hoy a diferencia de antaño, cuando el político era un respetado, un hombre culto, hay un sinnúmero de procesos penales a politicos que se les equipara a delincuentes con una caricatura de partidos politicos. En ese contexto, a pesar de su crisis, de sus propias falencias el Poder Judicial es autónomo, imparte justicia dentro de estándares de lo que es una recta administración de justicia. Los jueces hacen su trabajo juzgando a politicos corruptos, con la ley en la mano y dentro de una instancia plural en un estado de derecho, es decir con las garantías del debido proceso y del derecho a la defensa.
Decir que el Poder Judicial esta contra Fuerza Popular. Que Gustavo Gorriti -que es sin duda uno de los mejores periodistas de investigación, conjuntamente con gente de la nueva hornada que es para destacar- es la bestia negra, que con José Domingo Pérez orillaron a Alan García a que se suicide, es mas bien un intento de victimizarse, es subestimar la inteligencia ajena, es forzar ante un país con masas sin sentido crítico, a dar la impresión de que el Poder Judicial es utilizado para perseguir a nuestros prontuariados políticos injustamente, por móviles no jurídicos; buscando con esa desacreditación del Poder Judicial, quebrar los procesos y buscar impunidad. Eso obedece a un intento de tomarnos el pelo, de inducirnos al error, de cojudearnos hablando con propiedad. Todo esto es mas bien, la Cojudización de la Política y hay que decirlo sin tapujos.